Pies descalzos

Con un par de pies que caminan descalzos, con un sentir que no tiene descanso, con esto ando en mi camino. Largo y arduo se ha convertido el sendero por donde he decidido caminar, con espinas y un sol imponente que me ha obligado a detenerme solo para sentir cuán caliente está. Tomo fuerzas aumento mi ánimo y sigo caminando con este par de pies descalzos.

A merced del viento, la arena o la lluvia se encuentran mis pies, con una superficie áspera y en oportunidades inquietantes mi camino empieza a mostrarme los altos y bajos de la vida, los campos floreados y los minados, corro con prisa incesante por llegar a mi lugar deseado.

Percibo la naturaleza en su máxima expresión, a través de sus sonidos, de sus brisas, a través de sus olores, de sus colores y sabores, conozco un mundo lleno de sensaciones. Me permito conocer este mundo que me arropa, con mis pies descalzos, camino buscando otro lugar que pueda alojarme en su regazo.

Sin descanso se vuelven largas las horas mientras camino por esta vía, paso por alto tantas bellezas que el mundo me pone a mis pies, solo para enfocarme en cuan difícil se me hace llegar, ahora con ellos lastimados y dolidos son ellos mismos que me piden que abandone la partida y que continúe perdida.

Me rehúso a detenerme quiero seguir, quiero caminar más y más. Sé que al final de este sendero se encuentra mi lugar, mi lugar deseado, soñado y anhelado. Puedo verlo y sentirlo solo que estos pies se resisten a caminar descalzos.

El tiempo se vuelve mi aliado, el sol desciende y con su partida llega la luna, con una fría brisa y asimismo tan suave. Mis pies respiran sienten alivio, se sienten a salvo. Los invito a retomar las fuerzas necesarias para seguir caminando, ¡no desistiremos! sabemos que debemos llegar. Veo mis pies, están maltratados, sé que se sienten agotados, mi alma está cansada, mis ganas empiezan a cesar, necesito descansar.

Esta vez me abrazo junto a mis historias para poder cerrar los ojos, para culminar esta larga travesía, sólo por hoy. Debo continuar, necesito sentirme optimista, debo explicarles a mis pies que solo están descalzos en esta oportunidad, que a pesar de lo largo y tedioso que sea el camino, deben continuar firmes, junto a mí y confiando en que aquel lugar sí existe y en algún momento lo vamos a encontrar, donde se encuentra su paz y su comodidad.

GabrielaRey-.